Un recorrido por tres ministerios y una entidad del Gobierno Nacional, realizó en Bogotá el Alcalde Alberto Rivera Cifuentes, quien en compañía del Secretario de Planeación Elincer Herrera Flórez, acudió a estas instancias nacionales con el propósito de hacer seguimiento a los proyectos que han sido gestionados en su administración para Marsella, además de plantear nuevas alternativas de acompañamiento a las necesidades más prioritarias en materia vial frente a los desafíos que actualmente exige la ola invernal y nuevas ayudas en beneficio de los más afectados frente a esta calamidad.
En la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, el mandatario de los marselleses elevó la solicitud imperante frente al acompañamiento con recursos que permitan dar una solución de fondo a la compleja afectación en el Sector de Milancito, que ha afectado considerablemente el tránsito sobre este importante corredor vial entre Marsella – Río San Francisco y Chinchiná, Caldas, además de poder intensificar al inicio del año entrante la intervención en varios frentes de las vías rurales, por otro lado requirió del apoyo que complementariamente pueda atender de manera significativa las necesidades de las personas damnificadas por el invierno.
Sobre todo lo concerniente al componente vial para el mejoramiento de las vías rurales del municipio, el ejecutivo local hizo seguimiento ante el Ministerio de Transporte a los trámites que deban ser culminados para la ejecución del proyecto Colombia Rural, que en su administración fue postulado y que incluyó al municipio con un significativo aporte cerca de 4 mil millones para la construcción de placas huellas que incluiría el trayecto La Nona – La Convención.
Así mismo ante esta cartera, continuó reforzando la propuesta y necesidad de construir el puente sobre el Río Cauca en la Vereda Beltrán, como nueva alternativa de conexión vial y que deberá compensar a este sector por su solidaridad con las víctimas del conflicto armado. Como propuesta articuladora, el alcalde solicitó apoyo en el trabajo articulado con cooperativas y la labor comunitaria sobre las vías secundarias y terciarias, sumando a la ejecución de obras preventivas de bioingeniería para el manejo de aguas y la articulación para la implementación del plan vial como herramienta de planificación en los planes o esquemas de ordenamiento territorial.